Uno de los antojos más comunes es el de disfrutar de un poco (o un poco más) de chocolate, sea líquido, en crema o en tableta, se convierte en una “necesidad imperiosa” que desea ser satisfecha. En realidad el deseo o antojo del chocolate está relacionado con las bacterias que viven en nuestro sistema digestivo, o al menos así lo indica un investigador del Centro de Investigaciones Nestlé de Lausanne en Suiza.
No nos referimos a aquellas personas que esporádicamente y de vez en cuando desean satisfacer su instinto goloso, sino a aquellas personas que no pueden resistirse a disfrutar diariamente de unos bocados de chocolate. Al parecer, un tipo específico de bacterias presentes en el organismo serían las responsables del antojo del chocolate. En el estudio se tomaron los datos de un grupo de once personas que comían chocolate y otro grupo formado por el mismo número de personas que nunca comían chocolate (indican los autores que les costó bastante encontrar a personas que no tomaran el chocolate). A ambos se les realizaron distintos análisis para comprobar que no padecían ningún problema de salud.
La siguiente fase consistía en proporcionar idéntico menú a cada grupo y realizar diariamente análisis de orina y sangre para conocer si existía algún tipo de alteración en su metabolismo. El resultado mostraba que existían claras diferencias entre ambos grupos, los chocolateros presentaban menores niveles de colesterol malo y mayores niveles de otras sustancias.
Sin embargo, tras los análisis, el investigador indica que este resultado se encuentra directamente relacionado con los tipos de bacteria residentes en nuestro intestino y que ahora es necesario conocer cuál es la bacteria responsable del antojo. El estudio ha sido publicado en la revista electrónica Journal of Proteome Research.
Vía | El Universal Más información | Journal of Proteome Research (Pdf) Más información | Centro de Investigaciones Nestlé