No hace falta decir que uno de nuestros helados preferidos desde pequeños ha sido el Negrito de Frigo. Incluso en internet hemos encontrado comentarios de reivindicación pro-Negrito.
Qué fue de aquel vendedor de helados en la playa “heladoooos, poloooos y almendradoooos, al rico negrito que quita el hipo”. Si, si, no rimaba mucho, pero ya conocemos los repertorios de estos vendedores ambulantes de helados, que nos hacían reír (aunque cuando se te metía la cancioncita en la mollera…) y encima nos refrescaban mientras nos tostábamos al sol.
Pues bien, quizá te damos una sorpresa pero este verano vuelve Negrito, con su crujiente capa de chocolate, relleno de nata y chocolate y la galleta bañada por dentro, ¿de qué? de chocolate y esa bolita final que te hacía disfrutar hasta el último bocado. Y para mayor sorpresa, y claro, después de veinticuatro años, ha crecido y ahora se llama Negritón.
Pues ya que estamos, reivindicamos la reaparición del yogur de naranja de Danone, a ver si da resultado. El primero que salió era de naranja solamente y estaba delicioso, podía llegar a comerme cuatro yogures al día, pero desapareció. Posteriormente lo sacaron de naranja con cereales, no era lo mismo pero también estaba buenísimo y sucedió lo mismo.
Señores de Danone, ¿no es más clásico el sabor naranja que el de melón?. Ya de pequeñita me preguntaba… si hay refrescos de naranja y limón, caramelos de naranja y limón, etc., ¿por qué hacen yogures de limón y de naranja no?
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