A pesar de que en los últimos años se están desarrollando tapones de siliconas y otros materiales sintéticos, parece que nadie le puede ganar la batalla al corcho. Los grandes enólogos y apasionados del vino prefieren y defienden el uso del tapón tradicional, y es que va más allá de su uso práctico. Desde el alcornoque hasta la botella, el corcho es todo un arte que mantiene una relación íntima con la calidad del vino.
El corcho se viene usando para cerrar recipientes desde la Antigüedad, y desde que comenzó a utilizarse en el embotellado del vino francés la tecnología ha ido evolucionando con diseños cada vez más adaptados a las necesidades de las botellas. Así llegamos hasta la actualidad, con el novedoso sistema de tapón de rosca presentado recientemente por Amorim en colaboración con las bodegas la Estacada.
Desde el Antiguo Egipto hasta la industrialización
Numerosos hallazgos arqueológicos demuestran que ya en el Antiguo Egipto se empleaba el corcho del alcornoque como material para cerrar y sellar recipientes. Los pueblos griegos y los romanos fueron extendiendo su uso en diversos campos, destacando el cierre de las ánforas que contenían vino y otros productos.
Durante la Edad Media el corcho fue cobrando protagonismo, especialmente a raíz de la expansión de las campañas navales, hasta que en el siglo XVII francés Dom Pierre Pérignon apostó por el corcho como material para sellar las botellas de vinos de Champagne.
Con la llegada de la industrialización la técnica y fabricación de tapones de corcho se fue perfeccionando hasta desarrollarse una verdadera industria del corcho, siguiendo un camino paralelo al de la propia industria del vino. Hoy en día es un mercado mundial lejos de desaparecer que apuesta por la innovación en muchos campos diferentes.
El alcornoque y la sostenibilidad
El corcho no es más que la corteza del tronco del alcornoque, árbol originario de la cuenca mediterránea que concentra una gran producción en las dehesas de Portugal. Formado por u tejido de microcélulas, el primer descorche de un alcornoque comienza cuando el árbol ha cumplido unos 25 años de edad. Posteriormente cada descorche se realiza a intervalos de unos 9 años.
Para obtener el corcho del árbol se deben seguir unas técnicas manuales que dominan los descorchadores de larga tradición. El corcho se tiene que abrir y extraer en planchas, lo más grandes posibles, sin dañar el árbol. A partir del tercer descorche es cuando el alcornoque comienza a producir corcho de mayor calidad, el ideal para elaborar los tapones de vino.
La conservación de los bosques de alcornoques contribuye al mantenimiento de la biodiversidad con ricos ecosistemas de especies animales y vegetales y combate la desertificación. El corcho en sí mismo es un material natural que genera un impacto medioambiental mucho menor que otros como los plásticos. Además, es muy fácil reciclarlo y hoy en día los tapones se reutilizan en muchos usos diferentes.
El corcho y su papel en la conservación del vino
La historia del vino ha estado ligada prácticamente desde sus inicios a la evolución del trabajo del corcho, y es que sigue siendo el mejor material para la conservación de los caldos. A pesar de que desde ciertos sectores se están intentando popularizar tapones sintéticos, afortunadamente los grandes consumidores y expertos en vinos siguen confiando en botellas con tapones de corcho, garantía de calidad.
El corcho ha demostrado ser el único material capaz de conservar adecuadamente el vino respetando su evolución y sus propiedades con el paso de los años. Es un material sostenible que no daña el contenido de la botella, asegura un sellado perfecto y evita que penetren agentes externos como el aire, humedad o bacterias.
Para que un tapón de corcho cumpla su función y no estropee el vino, tiene que ser 100% de corcho natural, de buena calidad, de una pieza entera especialmente si está destinado a vinos de larga conservación. Y por supuesto, es importante conservar las botellas en posición horizontal, para mantener el corcho húmedo y evitar que se agriete.
Mirando hacia el futuro: el tapón de corcho de rosca Helix
A pesar de su carácter tradicional y artesanal, la industria sigue investigando hoy en día para ofrecer innovaciones tecnológicas que mejoren la producción y consumo del vino. En est sentido se ha presentado recientemente en España el sistema de tapones Helix, que combina botellas con rosca y tapones de corcho diseñados para poder abrirse y cerrarse cómodamente con las manos.
Ha sido la bodega Finca La Estacada la que se ha unido a Amorim, el mayor fabricante de corchos del mundo, para lanzar tres vinos de su gama Hello World! con este método de sellado. El sistema combina un tapón de corcho de diseño ergonómico con una botella de vidrio que esconde en el interior de su cuello un acabado de rosca.
Las botellas se pueden abrir y volver a cerrar con comodidad, facilitando la conservación al evitar roturas del corcho y dando la posibilidad también al resellado sin necesidad de maquinaria especial. Amorim ha desarrollado su sistema en colaboración con Owens-Illinois, Inc, gran fabricante mundial de envases de vidrio.
Puede ser sin duda la solución perfecta para aquellos consumidores que buscan disfrutar de un buen vino sin tener que pelearse con el abridor, y ofrece también muchas ventajas a los profesionales. Se demuestra así la tecnología y la modernidad no están reñidos con el mundo del vino, manteniendo el uso tradicional del corcho y la botella de vidrio pero apostando por nuevas prestaciones técnicas.
Por el momento se puede probar el sistema Helix de rosca en los tres vinos Hello World! de la Estacada, variedades cabernet franc, prieto picudo y petit verdot. Habrá que esperar unos años para comprobar si este es el camino a seguir por los profesionales del vino, y las posibles aplicaciones del sistema de corcho de rosca en otros campos. ¿Vosotros sois expertos descorchando vinos, o habéis tenido más de un disgusto rompiendo el corcho?
Imágenes | Helix Concept
Más información | Finca la Estacada
En Directo al Paladar | La suma importancia del corcho en la conservación de vinos