Las mosquitas de la cocina son una de las cosas malas que trae consigo el verano. De repente, cuando las temperaturas rebasan la veintena de grados, empiezan a hacer acto de presencia, especialmente por encima de la fruta.
Sin embargo, estos ágiles y pequeños insectos sobrevuelan cualquier parte de la cocina en las que haya comida fuera de la nevera o platos pendientes de lavar, ya que más que tener relación directa con la temperatura, están vinculadas a la presencia de alimentos con un estado que empieza a quedar comprometido.
Es cierto que a muchas personas les gusta el sabor de la fruta del tiempo, sin refrigerar en la nevera, y por ello deciden conservarla fuera del frigorífico, y ahí reside, en parte, la llamada a las mosquitas.
Por otro lado, también existen razones de maduración para mantenerla fuera de este electrodoméstico, por ejemplo, para conseguir que terminen de madurar, como es el caso de los plátanos y los aguacates.
Todo a la nevera
Pues bien, la primera y más drástica solución es guardar absolutamente cualquier alimento fresco en la nevera: esto evitará atraer mosquitas y que la pieza esté en buena conservación hasta que sea la elegida para comer.
Para quienes desean mantener la fruta y la verdura fuera del frigorífico igualmente, una solución intermedia es optar por un frutero que pueda taparse pero que permita el paso del aire: es decir, con una cobertura metálica, por ejemplo, de pequeños agujeros para impedir su entrada.
Revisar los jugos y el estado de la fruta
En este caso también será muy importante mantener en la cesta de la comida y de la fruta una higiene constante y revisar que ninguna pieza se ha echado a perder o que empieza a soltar jugos por estar demasiado madura.
Más allá de estos consejos, existe una batería de remedios para actuar directamente contra las mosquitas: desde matamoscas eléctricos hasta insecticidas, pero cuidado, en zonas donde hay alimentos es muy importante antes de su aplicación retirar cualquier producto comestible de la zona.
Olores que las echarán
También pueden aplicarse remedios naturales que a través de su fuerte olor repelan a estos pequeños insectos. La ventaja es que se trata de ingredientes que no son nocivos para las personas y resultan mucho más amigables.
El gran truco (que también se usa en panaderías y bares) es colocar medio limón con clavos de olor, una combinación que declarará la guerra a estos pequeños insectos, que optarán por marcharse a otra parte.
Frutero Mesa Cocina, Cesta Metalica De Frutas Con Tapa - Frutero Con Tapa Antimoscas - Rejilla Para Alimentos - Cesta Para Verduras - Frutero （2 Cesta Para Fruta Y 2 Tapas; 4 Piezas En Total）
La potencia de su aroma evitará que estos animales se acerquen a la zona. En la misma categoría se encuentra la albahaca, capaz de ahuyentar a muchos tipos de insectos.
Fotos | Oktavianus mulyadi/Unsplash, Sydney Rae/Unsplash y Jaspreet Kalsi/Unsplash.
