¡Nos vamos de picnic! Hay que prepararlo todo para disfrutar de una comida diferente en el campo, la montaña, la piscina o la playa. Cualquier sitio es perfecto si tenemos buenas viandas, mejor compañía y unas botellas de Coca-Cola bien frías.
Cómo organizar un día de picnic
Y para que todo salga bien, la organización y planificación es fundamental. Por una parte, debemos saber cuántos vamos a ser, para diseñar un menú acorde a todos los gustos y/o intolerancias; por otra, es importante conocer si sólo habrá adultos o también nos acompañarás algunos "peques".
Conscientes de que una vez que salgamos de casa ya no volveremos, tendremos que diseñar un menú equilibrado para que nadie se quede con hambre, pero tampoco sobre mucha comida. Para ello, lo ideal es preparar cinco tapas/aperitivos/bocados por persona.
Una vez que hemos elegido nuestro menú, elaboraremos la lista de la compra indicando los ingredientes que necesitamos para cada una de las elaboraciones. Cuando las tengamos listas, añadiremos a la cesta del picnic los básicos: sal, aceite, papel de cocina, servilletas, platos, cubiertos y bolsas para dejar todo bien recogido y que no se note que hemos pasado por allí.
Y, sobre todo, llenad bien la nevera de hielo y que no falte Coca-Cola para todos.
Para que vuestro próximo picnic sea diferente, os proponemos cinco recetas sencillas, pero con giro de ingredientes. Clásicos no tan clásicos para compartir, porque juntos sabe mejor.
Salmorejo de cerezas
Hay que hacer hueco en la nevera portátil para un refrescante salmorejo. En esta ocasión, nos hemos decantado por innovar la receta tradicional de la Cofradía del Salmorejo y hemos sustituido parte del tomate por cerezas.
Con ello hemos conseguido, no sólo un color más intenso, sino un sabor muy original y agradable que potencia esta receta.
Ingredientes
- 600 g de tomate pera maduro
- 400 g de cerezas
- 1 diente de ajo
- 200 g de pan de telera (candeal o amacerado)
- 100 ml de AOVE (aceite de oliva virgen extra)
- Sal
Cómo se prepara el salmorejo de cerezas
Aunque no es imprescindible, esta receta queda mucho mejor si utilizamos un robot de cocina o una batidora de vaso.
Empezamos lavando los tomates y quitando el pedúnculo (rabito). Los troceamos y colocamos en el vaso del robot de cocina o batidora.
Lavamos las cerezas y retiramos el hueso. Pelamos el diente de ajo, le quitamos el germen interior para que no repita y añadimos ambos al vaso. Trituramos hasta que no haya trocitos.
Incorporamos el pan troceado, mezclamos y trituramos durante 1-2 minutos, hasta que obtengamos una masa homogénea. Añadimos una pizca de sal al gusto y, con el robot de cocina o la batidora de vaso en funcionamiento, vertemos el AOVE en forma de hilo. Para que emulsione, dejamos trabajar al dispositivo durante unos 7 minutos a máxima potencia.
Una vez finalizado, repartimos en botes con cierre y refrigeramos hasta el momento de salir de casa.
Empanada de salmón a la carbonara
Las empanadas son estupendas para un día de picnic, ya que se pueden preparar con antelación, y frías están igual de ricas que templadas o calientes. Además, son muy versátiles, ya que admiten todo tipo de ingredientes.
Para alejarnos del típico relleno de atún y tomate, proponemos una empanada de salmón a la carbonara.
Ingredientes
- 500 g de salmón fresco
- 1 cebolleta
- 125 g de bacon
- 200 ml de nata para cocinar
- 2 láminas de masa de empanada
- 1 huevo
- Orégano seco
- Sal, pimienta y AOVE (aceite de oliva virgen extra)
Cómo preparar empanada de salmón a la carbonara
Calentamos un par de cucharadas de AOVE en una sartén y pochamos la cebolla cortada muy pequeña durante 5 minutos. A continuación, añadimos el bacon picado y salteamos otros 5 minutos.
Agregamos el salmón desmigado y cocinamos hasta que se haya hecho. Vertemos la nata, salpimentamos y espolvoreamos un poquito de orégano seco al gusto. Cocinamos durante 10 minutos a fuego medio y dejamos enfriar.
Precalentamos el horno a 180º. Batimos el huevo y reservamos.
Estiramos una lámina de masa de empanada y colocamos el relleno sin llegar a los extremos. Estiramos la otra lámina y cubrimos la anterior. Cerramos los extremos, bien con las dedos, bien con la ayuda de un tenedor.
Pintamos ligeramente con el huevo batido. Horneamos siguiendo las instrucciones del fabricante, en nuestro caso, 35 minutos a 180º.
Bagels llenos de sabor
Los bocadillos no pueden faltar en un buen picnic. Si además los hacemos más sabrosos, apetitosos y vistosos utilizando bagels, el éxito estará garantizado. Este pan es muy agradecido, porque no resta protagonismo a su contenido, a la vez que aporta mucho sabor.
En esta ocasión, nos hemos decantado por un relleno muy ligero y saludable. Tan simple como abrir el frigorífico y añadir a la nevera portátil tomate, aguacate (si está bien madura, será buena idea untarlo sobre el pan) y queso fresco.
Entre los básicos esenciales, no os olvidéis de la sal, la pimienta molida y el aceite de oliva virgen extra (AOVE), para sazonar y potenciar el sabor de los ingredientes.
Flamenquines de pollo con queso
Damos una vuelta a esta receta tradicional cordobesa y preparamos unos flamenquines con pechuga de pollo, jamón y queso.
Para que tenga éxito, hay varios trucos o consejos que podemos poner en práctica. Primero, utilizar un queso fundente. Segundo, prepararlos con antelación y dejar reposar durante al menos 2 horas en la nevera. De esta manera, será más fácil el rebozado y que no se deshagan durante la fritura. Y tercero, hacer un doble rebozado, lo que nos permitirá que los flamenquines sigan crujientes horas después de haberlos cocinado
Ingredientes
- 500 g de pechugas de pollo cortado en filetes muy finos
- 10 filetes de jamón serrano
- 5 lonchas de queso fundente
- 3 huevos
- Pan rallado
- Sal, pimienta negra y AOVE (aceite de oliva virgen extra)
Cómo preparar flamenquines de pollo con queso
Salpimentamos los filetes de pechuga de pollo. Sobre cada uno de ellos colocamos un filete de jamón serrano y media loncha de queso fundente. Enrollamos presionando y colocamos en un plato.
Cuando tengamos todos los flamenquines listos, tapamos con papel de aluminio y refrigeramos durante 2 horas. Transcurrido ese tiempo, batimos los huevos y colocamos en un plato el pan rallado.
Pasamos los flamenquines por huevo y, después, por pan rallado, repitiendo una vez más esta operación.
Una vez que tenemos bien empanados los flamenquines, freímos en abundante aceite de oliva virgen extra. Al sacar de la sartén (o freidora), escurrimos en papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.
Tortilla dulce de pan a la naranja
Esta receta es perfecta por varios motivos. En primer lugar y como buena receta de aprovechamiento, damos salida a esa barra de pan que nos sobró del día anterior. Y en segundo lugar, porque esta tortilla de pan dulce a la naranja es el postre ideal para un picnic, ya que no necesita nevera.
Ingredientes
- 160 g de pan del día anterior
- 350 ml de leche
- 60 g de azúcar
- Ralladura de naranja
- 3 huevos tamaño M aproximadamente
Cómo preparar tortilla de pan dulce a la naranja
Troceamos el pan en rebanadas lo más finas posibles y colocamos en un bol amplio. Añadimos el azúcar y la ralladura de una naranja. Vertemos la leche y mezclamos bien. Dejamos reposar un par de minutos y volvemos a mezclar, para que todo el pan se empape de la leche.
A continuación, batimos los huevos en un plato y vertemos sobre la mezcla anterior, integrando perfectamente.
Calentamos en una sartén un poquito de aceite y, con la ayuda de un pincel, pintamos toda la superficie de la sartén y sus paredes.
Vertemos la mezcla de la tortilla y cocinamos a fuego medio-alto durante 2-3 minutos. Damos la vuelta y cocinamos de nuevo hasta que cuaje.