Hace un tiempo vimos una serie de fotografías que recreaban bodegones con los caprichos gastronómicos de artistas musicales, y hoy quiero enseñaros otra propuesta también muy curiosa. De nuevo utilizando el género clásico del bodegón, el fotógrafo Dan Bannino ha querido inmortalizar esta vez dietas absurdas y algo extrañas llevadas a cabo por personajes famosos.
De nuevo nos encontramos con un autor que ha querido dar una categoría especial a ciertos alimentos, pues el bodegón es uno de los géneros pictóricos más tradicionales, normalmente relacionado con un cierto estatus social. El bodegón o naturaleza muerta cobró un gran protagonismo con el auge de la burgesía, y ahora Bannino recurre a su simbología para hacernos reflexionar sobre lo absurdo que es a veces seguir ciertas dietas.
Al mencionar las dietas de alimentación más extravagantes lo lógico es pensar en modelos o actrices, pero lo cierto es que son muchos personajes masculinos, y no relacionados con el mundo del espectáculo, los que también han caído en los parámetros absurdos de algunas dietas. Los motivos pueden ser diversos, aunque en general responden a presiones sociales, modas o creencias absurdas.
Dan Bannino explica cómo ha intentado captar la esencia de dietas como estas, reflejando la peculiar belleza que yace detrás de las constricciones y privaciones alimentarias. El ser humano es un animal extraño que se somete por voluntad propia a dietas absurdas, y curiosamente no es un fenómeno reciente, sino que ya se pueden encontrar ejemplos en el siglo XV.
De este modo, Bannino nos muestra fotografías con la alimentación típica que siguieron personajes como Beyoncé, Bill Clinton o Lord Byron, creando composiciones inspiradas directamente en los bodegones de los antiguos maestros de la pintura.
Por ejemplo, Beyoncé siguió durante un tiempo una de esas famosas dietas "depurativas", que consistía básicamente en beber una mezcla de zumo de limón, sirope de arce, cayena, té laxante y sal. Tampoco faltan las concesiones humorísticas, como demuestra al añadir a la imagen varios rollos de papel higiénico.
El caso de Lord Byron es curioso porque se le considera uno de los primeros famosos en seguir una dieta extrema que captó la atención del público, originando la moda de perder peso rápidamente. Una de sus rutinas de alimentación consistía en la llamada "dieta del poeta romántico", con abundante agua con gas, galletas y patatas con vinagre.
La intención de Dan Bannino no es glorificar las dietas, y menos las que son tan absurdas como las de estos ejemplos, sino llamar la atención sobre ellas. Al sacarlas de contexto y ponerlas al nivel de una obra de arte tradicional, nos invita a la reflexión sobre esta faceta de la naturaleza humana, denunciando no sólo la extravagancia, sino también lo peligrosas que resultan.
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