Presentes en las bandejas de carne que compramos ya cortada, generalmente en el supermercado, son dos las razones fundamentales de estas almohadillas. Da igual el tipo de producto en el que estén presentes, pues sus motivos de uso son los mismos.
No importa que se trata de carnes o pescados, incluyendo pollo, ternera, cerdo, cordero o carne picada. De hecho, es muy frecuente que sean las bandejas de procesados, como carne picada, albóndigas o hamburguesas las que usen estas almohadillas.
También pasa con el pescado que viene ya envasado y todos estos ingredientes tienen en común un par de debilidades que 'obligan' al producto a utilizar estas almohadillas. Como es lógico, se trata de un uso alimentario permitido que hace que estos materiales puedan estar en contacto con los alimentos sin problema.
Para qué sirven las almohadillas de las bandejas de carne
Parecida a una toallita absorbente, estas almohadillas tienen un uso muy lógico: absorber la mayor cantidad de líquido posible que mana de estos productos. Es algo habitual, sobre todo cuando son procesados, pues no dejan de ser tejidos musculares más o menos trabajados que, como es lógico, tienen agua.
No tiene que ver con mitos y falacias como que esta carne es de peor calidad porque le inyectan agua ni sandeces similares, sino con la pura realidad del tipo de producto. Es posible además que hayas leído que esta almohadilla absorbente es un detalle del productor para que no haya líquido en la bandeja y manchemos menos la cocina.
También verás que otras teorías —peregrinas igualmente— apuntan a absorber ese líquido de las carnes y así conseguir que no lo suelten cuando lo cocinemos. Realmente esto es una función secundaria de esta almohadillas, ya que al absorber líquido evitan una mayor proliferación bacteriana si la carne en cuestión estuviera empapada.
Tal y como explican desde Mercadona, estas almohadillas absorben el jugo que suelta la carne y reducen la posibilidad de que crezcan bacterias.
De qué material están hechas estas almohadillas
Este tipo de almohadillas absorbentes, tal y como indica la compañía valenciana, se hacen con celulosa, que es lo que permite la absorción. Además, tienen un plástico alimentario que las protege también, que no implica riesgos para la carne.
En cualquier caso, a pesar de ser aptas para el consumo con alimentos, no son comestibles. Parece evidente, pero no está de más recordarlo y explicar que, en caso de que se cocinasen junto a la carne, se recomienda no consumir el producto.
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Las almohadillas absorbentes que están en las bandejas de carne son de celulosa. Absorben el jugo que suelta la carne y reducen la posibilidad de que crezcan bacterias en el producto. Son aptas para el contacto con los alimentos, pero no son comestibles (en el caso de que se hayan cocinado junto con la carne se recomienda no consumir el producto).
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