Con más de 100 años a sus espaldas, el mítico Versalles cierra sus puertas en el barrio barcelonés de Sant Andreu, una noticia que acaba de trascender.
Según publica la prensa local, los motivos de este cierre son claros: este bar no ha podido remontar la crisis que arrastraba por la pandemia, ni seguir satisfaciendo el alquiler del establecimiento, muy elevado para la facturación del establecimiento.
Por ello, esta semana ha anunciado su decisión de cerrar sus puertas más de 100 años después de haber empezado a protagonizar la restauración de esta conocida calle de Sant Andreu.
Libro abierto de historia
Situado en el número 255 de la calle Gran de Sant Andreu, este emblema vecinal fundado en el 1915 ha anunciado que cesa su actividad, perdiéndose el patrimonio de su esencia.
En su interior, un mobiliario original al estilo de primeros del siglo XX, con muebles modernistas de madera y lámparas doradas a conjunto y una serie de episodios históricos de gran envergadura.
Por ejemplo, uno de los hitos históricos de este local es haber servido de refugio durante los bombardeos a la ciudad condal durante la Guerra Civil.
También fue simbólico su cambio de nombre frente a la dictadura franquista, que obligó a rebautizar al (hasta entonces) Petit Versailles como Versalles, un nuevo nombre para sonar más castellano.
Actualmente en manos de la familia Heredero, este local había implementado medidas para rentabilizarse, sin éxito, con fórmulas que habían incluso llegado a incomodar a los vecinos más partidarios de la propuesta histórica.
En el plano gastronómico, el bar Versalles es un establecimiento dedicado a las tapas clásicas, como las patatas bravas acompañadas de vermú, pero también a platos tradicionales, como el entrecot Robespierre y a la nueva fusión con salmón ahumado o las gyozas de ternera.
Foto | @Versalles1915/Instagram
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